Excursión a un sitio inédito para casi todos los que nos decidimos deleitar con estos lugares que son poco habituales para el club. Salimos a las 8:30 de la mañana del lugar convenido y luego segunda cita en la gasolinera y oh sorpresa cuando llegamos a nuestro lugar de partida (Venta Vicario) se incorporan de forma imprevista al grupo y casi por los pelos Ramón y Pilar. Ana Crespo les prometió un reloj suizo. Nuestro grupo de aventura es sobresaliente, o mejor de matrícula, somos 10 y nuestra mascota (Bruno).
El inicio del camino no lo tiene demasiado claro nuestra guía, Ana la Volaora pero pronto hace gala de su seguridad y nos dirige por la ruta adecuada. Vamos disfrutando del valle del arroyo del Baúl, que juguetea con nosotros continuamente forzándonos a que "degustemos" sus frías aguas, unos con el pie derecho, otros con el izquierdo, unos hasta el tobillo, otros hasta la rodilla; en fin, todos tuvimos ocasión, en las múltiples veces que lo cruzamos, de sentir su "frescor". Cuando ya dejamos el arroyo y creíamos haber superado nuestra lucha con el líquido elemento, aún tuvimos que sortear una pequeña acequia desbordada y más tarde el agua brotando de la tierra en nuestros pies. Menos mal que el día era bueno y brillaba el sol entre pinos y arces y permitió que nuestros pies se secaran.
Por una senda ya más marcada entre pinos, Pablo, que viene cargado de bibliografía, nos va explicando las distintos tipos de pinos que vamos viendo (albar, nigrus, resinero, piñonero ......) y sus formas de reproducción, mientras la cabeza de la excursión se dedica a pegar un buen tirón que nos deja un poco descolgados casi al inicio de la ruta. Sin embargo, pronto llegamos a un bello paraje que reúne de nuevo al grupo, es una zona más abierta del valle con unas rocas imponentes dispuestas de forma particular y que el parque de la sierra de Baza ha utilizado para publicitarse poniendo una pequeña placa. Hay un cortijo destruido y unas edificaciones también en ruina estamos en la Fábrica del Pardo, que en su día fue una explotación de plomo, aún queda resquicios de ella, de las bocas de la mina ahora cerradas y de piedras cuyo peso es mayor que el esperable por su tamaño.
Después volvemos a cruzar de nuevo el rio y cambiamos de dirección otra vez a la derecha y entramos ya en el valle de la Fonfría, al inicio cuesta encontrar la ruta pero en pocos metros se define y se señaliza con marcas verdes y blancas. Ascendemos por la ladera de la montaña entre uno de los mayores pinares autóctonos de la zona, el pinar es denso. Al fin llegamos a uno de los hitos de nuestra ruta El Pino de la Señora situado a 1720 metros de altura, es un espécimen de pinus nigra o laricio ..... aquí hacemos un pequeño descanso, tomamos energía alimentaria y la que nos ofrece el abrazo del pino de unos 6 metros de perímetro y de alrededor de 350 años de vida. Llama la atención un hueco quemado en su base y su importante inclinación, todas sus ramas están orientadas hacia el lado contrario de este hueco. Para enriquecer nuestra culturilla diré que este hueco se llama peguera, y era donde los "pegueros" quemaban leña de pino para sacar pez y alquitrán con el que hacer las teas. Estos fuegos son los que hicieron que no existan ramas en este lado del árbol y produzca la inclinación. Aún con la acción del hombre el árbol mantiene una apariencia mágica, sobre todo si miramos hacia arriba y observamos el enjambre de ramas de su copa.
Siguiendo con botánica, también llama la atención a lo largo del camino la cantidad de pinos con muérdago "(Viscum album) una planta semiparásita que en caso extremos debilita al huésped y lo hace más vulnerable al ataque de insectos, debilitándolo hasta poder llegar a agotarlo". El entrecomillado es sacado de internet, que yo no sé tanto de esto.....
Luego continuamos nuestra ruta aún por el pinar y a campo través, a partir de aquí las señales se perdieron, la ladera se empinó y nuestro corazón se aceleró.... por supuesto por la belleza del paisaje, claro. Al fin llegamos a un carril que ya nos acerca a la loma que sube a la cumbre, al llegar al collado la vista es magnifica, ya se puede ver Sierra Nevada, tenemos enfrente todos los picos de la parte almeriense. Parece que no es apenas nada, pero la loma se hace larga, aunque muy suave. Al fin coronamos el Picón de Gor con 2150 mts. Si algo hay que decir de este pico es que las vistas en sus 360 º no son a las que estamos más acostumbrados, la visión de Sierra Nevada es particular, en frente tenemos como ya he dicho la almeriense pero luego ya vemos todo el Chullo, el Morrón Sanjuanero y el Picón desde el levante. Sobre el Picón de Jérez se insinúa el Mulhacén y más a la derecha el Veleta, pero desde aquí impresiona que el Picón y su loma es el último pico de Sierra Nevada, que no hay nada más detrás. Luego vemos bien la Sierra de Huétor y Arana, Sierra Mágina, Cazorla, aquí si que hubo disquisiciones entre que pico era cada cual, el Gillillo, el Rayal ,el...... , La sierra de Castril , la inconfundible Sagra, la Sierra de María, los Filabres y como no, a nuestro lado la Sierra de Baza. En fin todo un atlas físico de la montañas de casi toda Andalucía Oriental. En la cumbre, a pesar de que corre un discreto vientecillo, le damos buena cuenta a nuestras viandas, el problema mayor era a donde mirar.
Después iniciamos el descenso por el lado Este también a campo través, sin gran dificultad y observando las pequeñas florecillas que anuncian la incipiente primavera. Al llegar a la civilización solo resta tener que dar un rodeo de 20 minutos porque todo está vallado, uffff, que largo se hizo pensando en la cerveza fresca que nos esperaba en Venta Vicario. Pero oh¡¡¡ sorpresa Venta Vicario está cerrada, así es que tuvimos que posponer nuestra cerveza unos kilómetros más a delante, pero no hubo perdón. "El tercer tiempo" se desarrolló de forma adecuada y con la satisfacción de todos.
Bibliografía
Víctor Azor López
Ing. Técnico Forestal
Azor Medioambiente. Ingehttp://www.sierradebaza.org/index.php/fichas-tecnicas/79-reportajes/799-13-12-notic8niería
Kika